Si nos remontásemos 25 siglos atrás, a la época en que las polis griegas dominaban occidente y Esparta se erigía como la principal potencia militar, nos podríamos encontrar con uno de los primeros sistemas de entrenamiento físico para militares, o guerreros como eran conocidos en aquella época. Entonces, la principal arma era la unión y disciplina de los soldados y su capacidad combativa, ya que todo combate era cuerpo a cuerpo y los ejércitos debían cubrir extensas distancias en marchas a pie, a veces en condiciones climatológicas poco favorables. Por esto, los espartanos crearon un sistema social completamente centrado en la formación y excelencia militar, dándole a la preparación física una gran importancia, siendo reconocidos mundialmente por la fuerza y resistencia de sus falanges en el campo de batalla.

Con el paso de los años, las demás civilizaciones y ejércitos fueron imitando  sus sistemas de entrenamiento físico. De hecho, heredado de la tradición militar de transmitir la importancia del ejercicio físico, con el tiempo, se creó un estilo particular de entrenamiento para militares que actualmente es llamado Entrenamiento Funcional.

El entrenamiento funcional, es un sistema de entrenamiento que envuelve muchos grupos  musculares en un solo movimiento, con lo cual se logran capacidades que se asemejan de mejor forma al empleo en escenarios reales. Para ello, se adaptan los ejercicios a las necesidades personales, orientado a mejorar las funciones diarias y a aumentar la calidad de vida de quienes lo practican. En la mayoría de los WOD (workout of the day) se ocupan  ejercicios multiarticulares y multimusculares que a través de las cualidades físicas, resistencia cardiovascular y respiratoria, fuerza, flexibilidad, potencia, velocidad, coordinación, agilidad, equilibrio y precisión, se logra un completo sistema de entrenamiento para el militar. Si nos ponemos a pensar detalladamente en cada cualidad física, estas son las que debe tener muy bien entrenado un soldado para poder cumplir con una misión en terreno.

En mis años de experiencia profesional entrenando militares, incluyendo a patrullas que compiten internacionalmente, postulantes a especialidades secundarias en Chile, cursos de Ranger (USA) y Lanceros (Colombia) entre otros, he utilizado con éxito este sistema de entrenamiento, que ha demostrado ser muy eficiente y con resultados que son palpables por quienes mejoraron sus marcas y capacidades físicas.

Para ello, me enfoco en obtener una buena base física mediante el entrenamiento funcional; una vez obtenida una buena base física, voy incluyendo a los WOD trabajo con equipo como arnés, mochila, casco y fusil, logrando con ello las tres “R” del entrenamiento militar: riguroso, realista y relevante. Con esto, busco simular los sentimientos y estresores de los combatientes en una situación real de fatiga física y mental. Lo anterior, genera el concepto de “funcionalidad” de este tipo de entrenamiento y además, se refuerza el espíritu de cuerpo, el trabajo en equipo y el liderazgo. Algunos tipos de entrenamientos que me han resultado eficaces son los siguientes:

1. Circuitos: se basan en una combinación de ejercicios que se realizan en un orden establecido y que combina el trabajo de fuerza, velocidad y agilidad. Por ejemplo, realizar el máximo número de repeticiones de un total de 10 ejercicios, en los que se incluyen flexiones, arrastres y flexo-extensiones de piernas.
2. Cross Training: este tipo de entrenamiento es ideal para combinar el trabajo de fuerza y entrenamiento metabólico con equipamiento mínimo. Se trata de un entrenamiento de alta intensidad que requiere de las principales capacidades físicas, y bien entrenadas, se pueden obtener grandes beneficios. Ejercicios de levantamientos olímpicos, resistencia cardiovascular, ejercicios gimnásticos, con intervalos cortos, con alta intensidad de ejecución.
3. Entrenamiento metabólico: dirigido a la mejora de la capacidad cardiovascular así como a la resistencia global. Hay una predominancia de las vías aeróbicas y los ejercicios con los que se puede trabajar son: remo indoor, bicicleta, correr y natación.

En los dos primeros tipos de entrenamiento hay un mayor predominio de la vía anaeróbica aláctica, ya que son esfuerzos muy cortos e intensos con una duración de segundos, permitiendo obtener el ATP (trifosfato de andenosina,  fuente principal de energía utilizable por las células, para realizar actividades) mediante la degradación de hidratos de carbono sin O2, mientras que en el entrenamiento metabólico la vía predominante es las aeróbica.

Con el tercer tipo de entrenamiento, encontramos la capacidad de ganar músculo, aumentar la fuerza, mayor rendimiento físico, coordinación y mayor agilidad. Un ejemplo de este modelo sería un HIIT (entrenamiento interválico de alta intensidad, en donde el esfuerzo tiene que acercarse a los límites máximos, que incluye periodos de descanso.

Como conclusión, el Entrenamiento Funcional que también se le conoce como Crossfit  (aunque esto es solo una marca registrada), es el más completo porque ayuda a quemar grasa corporal, mejora la postura del cuerpo y la estabilidad, evita lesiones, trabaja todas las cadenas musculares simultáneamente, simula una actividad de la vida cotidiana, trabaja todas las capacidades motoras como equilibrio, coordinación, flexibilidad, fuerza, potencia, resistencia todas ellas capacidades fundamentales para un militar, y además el tiempo que se requiere en cada WOD es mucho menor al que un entrenamiento tradicional.

No quiero dejar de mencionar lo más importante cuando se realiza este sistema de entrenamiento, es que debe ser bajo la supervisión de un profesional de la actividad física y del deporte, porque el nivel de práctica recomendada es relativo y no igual para todas las personas. El entrenamiento debe ser personalizado y previamente estudiado en función de la capacidad de cada uno y luego pasar a una etapa colectiva.

Juan Pablo Carrasco Morales